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Problemas de tiroides

En medicina funcional, el tratamiento de la disfunción de hormonas tiroideas puede involucrar el uso de varias herramientas terapéuticas:

  • Nutracéuticos, probióticos o prebióticos
  • Optimización de las vías de biotransformación (detoxificación) y eliminación
  • Alimentos médicos
  • Hormonas tiroideas bioidénticas
  • Tratamiento para otras enfermedades o disfunciones que dificultan la regulación hormonal.

La glándula que produce las hormonas tiroideas se encuentra en la base del cuello, en la parte anterior de la garganta, esta glándula en forma de mariposa mide de 4 a 6 cm y lleva a cabo el metabolismo de dos hormonas principales: la hormona T3 o triyodotironina, y la hormona T4 o tetrayodotironina. La hormona T4 se encuentra en mayor concentración que la hormona T3 en nuestro cuerpo, en una proporción de 9:1, una función tiroidea saludable debe asegurar la conversión de hormona T4 a T3, la hormona metabólicamente activa.

Las personas con una deficiencia de hormonas tiroideas, pueden presentar:

  • Fatiga
  • Aumento de la sensibilidad al frío
  • Estreñimiento
  • Piel seca
  • Aumento de peso
  • Dolores, sensibilidad y rigidez muscular
  • Afinamiento del cabello
  • Ritmo cardíaco lento
  • Memoria deficiente
  • Hinchazón de la cara
  • Ronquera
  • Debilidad muscular
  • Nivel de colesterol en la sangre elevado
  • Dolor, rigidez o inflamación de las articulaciones
  • Periodos menstruales irregulares o más intensos de lo normal
  • Depresión
  • Glandula tíroide agrandada (bocio)

Es importante mencionar que varios de estos síntomas como irregularidad menstrual, depresión, fatiga, rigidez muscular y piel seca son síntomas que también experimentan algunas mujeres durante la perimenopausia, por lo que siempre es importante acudir a consulta para identificar la causa subyacente de los síntomas y recibir el tratamiento adecuado.

Las personas con una sobreproducción de hormonas tiroideas pueden presentar:

  • Nerviosismo o irritabilidad
  • Fatiga
  • Debilidad muscular
  • Problemas para tolerar el calor
  • Insomnio
  • Temblor (generalmente en las manos)
  • Latidos cardiacos irregulareso rápidos
  • Deposiciones frecuentes o diarrea
  • Pérdida de peso
  • Cambios de humor
  • Glándula tiroides agrandada (bocio)

Para un metabolismo adecuado de hormonas tiroideas y una conversión efectiva de hormona T4 a T3, el cuerpo necesita nutrientes como yodo, zinc, cobre, selenio y tirosina en cantidades adecuadas. Una deficiencia de uno o varios de estos nutrientes puede
causar un hipotiroidismo.

En medicina funcional, se busca también otras causas que influyen en la disfunción tiroidea:

Disbiosis

Un desequilibrio de la microbiota intestinal puede afectar la conversión de hormona T4 a T3

Carga tóxica acumulada

El mercurio, el flúor, y otros elementos químicos pueden interferir en la conversión de hormona T4 a T3

Desequilibrio hormonal

Niveles elevados de cortisol y estrógeno se han relacionado con disfunción de hormonas tiroideas

Enfermedad autoinmune

Es importante la medición de anticuerpos antitiroglobulina y antiperoxidasa para identificar una tiroiditis de Hashimoto o enfermedad de Graves-Basedow

Salud hormonal

En medicina funcional, sabemos que varias personas pueden presentar los mismos síntomas, pero que las causas pueden ser diferentes, y, por lo tanto, el tratamiento debe ser personalizado y dirigido a tratar las causas subyacentes de cada disfunción orgánica.

Es posible que sea necesario solicitar estudios de laboratorio más especializados para conocer las deficiencias nutricionales o los metabolitos hormonales que brindan información crucial para la elección de un tratamiento más adecuado.

El tratamiento puede involucrar: el uso de nutracéuticos para el aporte de nutrientes indispensables en el metabolismo de hormonas, el uso de hormonas sexuales bioidénticas, uso de hormonas tiroideas bioidénticas, nutracéuticos para la regulación de la función hormonal o suplementos de plantas medicinales conocidas como “adaptógenos” para regulación del eje HPA.

¿Qué tienen en común la insulina, el cortisol, la testosterona, el estrógeno, y la vitamina D3? Que todas son hormonas y llevan a cabo diversas funciones sumamente importantes en nuestro organismo para que todo marche de maravilla.

Por ejemplo, la progesterona es una hormona sexual femenina, a la cuál algunos ginecólogos se refieren a ella como “la hormona Zen” ya que algunas de sus funciones son proveer un estado de ánimo de bienestar, relajación y mejorar la calidad de sueño.

El cortisol por ejemplo es mejor conocida como “la hormona del estrés” ya que se eleva cuando estamos pasando por un momento o un periodo de estrés físico o emocional, aún si éste no se percibe como tal.

Algunas funciones del cortisol incluyen: reducción de inflamación, supresión del sistema inmune, y elevación de los niveles de glucosa en sangre.

Cuando hablamos de una disfunción hormonal, podemos experimentar diversos síntomas, varios que incluso, parecieran no estar relacionados a un mismo padecimiento:

  • Bajo libido
  • Incapacidad para alcanzar el clímax sexual
  • Aumento de la grasa abdominal
  • Pérdida de masa muscular
  • Dolores de cabeza
  • Insomnio
  • Caída de cabello
  • Dificultad para controlar la temperatura
  • Depresión
  • Ansiedad
  • Irritabilidad
  • Fatiga
  • Repentinos cambios dehumor
  • Resequedad de la piel
  • Pérdida de memoria a corto plazo
  • Dificultad para concentrarse
  • Bochornos
  • Dolor articular
  • Pérdida de masa ósea (osteopenia-osteoporosis)

En medicina funcional consideramos que puede haber diferentes factores que causan una disfunción hormonal, entre ellas:

  • Deficiencia ej. Una deficiencia de iodo, tirosina, selenio y zinc está de micronutrientes relacionado a hipotiroidismo.
  • Exceso de ej. Un exceso de colesterol en sangre aumenta el tejido micro o adiposo y  la producción de estrógeno macronutrientes a través de una enzima que se llama aromatasa.
  • Carga tóxica ej. Disruptores endócrinos, como el bisfenol-A o BPA acumulado : un derivado de los plásticos que se asocia a enfermedades metabólicas como diabetes tipo 2.
  • Disfunción del ej. Una elevación crónica de cortisol, “la hormona del eje HPA (hipotálamo- estrés”, puede llevar a una disfunción del sistema pituitaria-adrenales) y retroalimentación negativa en el cerebro; causando la alteración del control de otras hormonas.

Problemas digestivos

En medicina funcional el objectivo del tratamiento es tratar la raíz del problema digestivo:

  • Eliminar patógenos
  • Reparar tejido lesionado

  • Reparar la permeabilidad intestinal
  • Restaurar el microbioma del aparato digestivo

El motivo de consulta médica más frecuente en México después de infecciones respiratorias agudas es por síntomas gastrointestinales.

En la actualidad, más del 50% de las personas adultas en México padecen de: gastritis, reflujo gastroesofágico, estreñimiento, inflamación o dolor abdominal. Síntomas para los cuáles muchas personas prefieren auto medicarse con tratamientos paliativos en vez de acudir a una consulta médica.

Algunas de estas molestias pueden persistir por años, incluso décadas, si no se tratan adecuadamente.

A través del abordaje de medicina funcional, podemos no solo tratar los desagradables síntomas de un problema digestivo, sino también restaurar el tejido que recubre todo el tracto gastrointestinal; eliminar bacterias, virus o parásitos a través de un tratamiento natural y regresar a un equilibrio al microbioma digestivo.

Es recomendable acudir a una consulta de medicina funcional si presentas uno o varios de los siguientes síntomas:

  • Gastritis
  • Reflujo gastroesofágico
  • Dolor o ardor en pecho
  • Dolor o ardor en garganta
  • Dolor abdominal
  • Inflamación abdominal
  • Intolerancia a los alimentos
  • Exceso de eructos
  • Exceso de gases intestinales
  • Estreñimiento
  • Diarrea o heces blandas

Otras condiciones en las cuales te recomendamos consultar un medico para prevenir futuras disfunciones o enfermedades digestivas cronicas:

  • Haber padecido una infección gastrointestinal por Helicobácter pylori
  • Haber tomado un tratamiento de antibiótico(s) por un largo periodo de tiempo
  • Haber tomado varios tratamientos de antibióticos a través de los años
  • Tener un estilo de vida que involucra: estrés, ingesta de alcohol, tabaco, alimentos altamente procesados y con aditivos.

El tratamiento en medicina funcional involucra mucho más que el uso de antiácidos, antiinflamatorios y antiespasmódicos intestinales; se hace uso de nutrientes específicos, enzimas digestivas, probióticos clínicamente estudiados, aceites esenciales, alimentos médicos.